jueves, 23 de octubre de 2014

"guitarra, amiga, mujer... y más"

querida amiga y compañera, de curvas que provocan deleite y pasi´n en quien te acaricia y te atrae hasta su cuerpo ya vibramte de deseo y pasión... Amiga que supiste sacarme el corazón de entre los dedos rasgados de un sueño, tal vez otro tiempo olvidado y que aqui junto a tí recordaba en las tardes de otoño entre un café y un lamento, junto a una chimenea que calienta mis fríos deseos de vivir. Madera que acaricia de forma fortuita mi piel, seis hilos forjan tu voz y una boca, ora callada, que atruena y estremece en dolor pasión, valentía y dicha a cuantos la escuchan...Esa eres tú, mi guitarra i compañera de viajes en el espacio en la vida, en el tiempo... y en la fantasía... guitarra, siempre tú, alguna vez fuiste mía... pero siempre guitarra.


No pocas fueron las ocasiones que en aquellas sensuales curvaturas hundía mis quejidos, mientras en tu silencio sentía el calor de una madre que con su vibrar abraza al niño con el cálido afecto de unamelodía... Sería y fría sí, tal vez en exceso, hierática, desde casi la indiferencia, perocuando tus cuerdas hablaron me dijeron la solución a mis problema, tal vez, el anhelo mejor guardado que al final supe que estaba justo ahí, escondido no más lejos de lo que era mi propio corazón y qu emi mente no oía ni escuchaban pidiendo clemencia por poder salir al a luz del día...  Cuantas noches en mi estudio en la soledad d ela locura que al músico le persigue desde la sinrazón de la vida, te miré  ala cabeza y ahí solo veía tus nacarados dientes... y nada más...




Hoy  sigues siendo mi compañera, mi amiga, mi amante cuando nada ni nadie sabe cómo hacerme salir de esta locura, siempre dispuesta al combate d ela razón y el pensamiento, d ela sinrazón y la locura, del silencio y la propia vida qu enos conmueve y nos lleva por sinuosos caminos cual guitarra fuera...

Gratitud pues para tí, oh amiga desde el infinitum más profundo hasta lo más íntimo de mi camino que un día terminará vibrando tal vez contigo... Sea pues, un elogio  de curvas y cuerdas, de madera... y sentimiento, en esencia la dicha de ser, por qué no, también mujer


Rafael Castro 
Lince Apache

lunes, 20 de octubre de 2014

"oro de otoño"




Oro de otoño

Copas de vida

De grana y oro

Así. .. es la vida.

Se prepara el final,

Que es el morir

Buscando la gloria

Del re- vivir.

Ocres de otoño

Canto de libertad

Oro de esperanza...

Y de libertad.


"Otoño poemático"
Rafael Castro MNartín
Lince Apache

jueves, 2 de octubre de 2014

“¡En papel!!!!!”

            La mañana no revestía ningún entusiasmo y acontecimiento porque estar más despierto, más entusiasmado o más feliz de sentirte muerto de sueño metido en una línea de autobús urbano entre sonnolientas respiración, y pensamientos perdidos en la vaguedad de lo absurdo. Era un viernes, es cierto, algo que anima a pensar que tal vez máñana sea diferente, sea festivo y con ello comenzar una oleada de “noes”, no madrugo, no trabajo, no obligaciones sociales, no sobreesfuerzo emocional, no hacer lo de los demás sino lo mío, no no no… pero eso era mañana, ante mí 17 horas de realidad real… impresionante.

            Pero, de repente, entre aquél cúmulo de ideas y gentes, de mochilas carpetas, maletines, bolbsos, bolsas. Entre sombreros gorros, gorras, melenas al viento, pelo de cresta, calvos y tal vez algún despistado, la vi, sí sí a ella, una señora, sin auriculares pegados a sus orejas escuchado su reproductor mp4, ipod, o teléfono inteligente… o no; estaba ahí sentada sin hacer “NADA”, impresionante… especialmente porque esbozaba una sonrisa lo cual ya en un autobús urbano es escaso y a las siete de la mañana como indico… algo casi, en vías de extinción. Más aún, no esbozaba una sonrisa, era una sonrisa en sí misma ya que la ví asonreir no solo con sus labios, carnosos, decorados con un bello carmín rojo sin ser grotesco qu ele daba elegancia y prestigio. La vi sonreír ccon aquello que pocos valora y se atreven a mirar, con esa parte que todos tenemos situado en prestigiosa e importante lugar y a donde mirar en ocasiones nos da miedo, otras vergüenza y que, ca

            Y finalmente, hizo ya la acción final… levemente abrió su bolso y saco… “Un papel”, ya saben aquellos documentos en celulosa donde escribíamos cosas y anotaciones y que hoy ya las anotamos en el teléfono o en cualquier soporte electrónico, dicen qu epor ser más ecológicos y no contaminar el medio ambiente. Y no era un papel pequeño, no señor, tenía pinta de ser… “Una Carta”, aún hay gente romántica que recibe y escribe correspondencia postal, y aún les diré más… “¡la he visto leer ese documento!!!!” ¿Acaso alguien pensó que en un autobús urbano, o en el metro no se puede leer documentos en papel… pues sí señores, aún queda gente romántica que escribe cartas postales, que leer en papel y que no necesita de tecnologías para poder estar  ahí sumergida en su propia vida mientras los demás vamos enganchados a nuestro ordenador, llamado inteligente, al wassap, al ebook, al ipod, al ipad.. entre tanto “juguetito” electrónico, hay quien tiene un trozo “EN PAPEL” y que lo lee disfrutando de aquello que ponía en él y que a buen seguro debió ser importante pues manifestaba mirada de atención y cuidado en el documento como si fuera algo delicado y extremadamente sensible, que a buen seguro lo era, no el apel en sí sino su contendio.

            Estamos perdiendo los detalles más maravillosos, aquellos que nos esboza un sentimiento, una reacción, una sonrisa, una caricia o una sorpresa. Dejar de sorprendernos supondrá de estar vivos y eso puede ser terrible para la condición humana. Lamentablemente me hubiera encantado hablar con aquella mujer pero mi parada llegó y tuve que apearme para seguir con mis prisas, mi estrés, mi iphone y disponerme a trabajar desde un ordenador pensando “Qué hubiera pasado si el hombre perdiera la electricidad  por un día, si no funcionara todo lo eléctrico ni electrónico, si las baterías se muriesen, la corriente cayera en picado y todo lo que hubiera fuera nuestra propia identidad… Tal vez aquel anónima Amiga seguiría sonriendo mientras los demás entraríamos en un pánico existencial, tan irreal como todo lo que estas viendo en este momento, pues, por si no te has dado cuento “esto” no es un papel aunque tú sí lo estés leyendo

Feliz día



Rafael Castro
Lince Apache